Espuma de limón y yogurt con ácido láctico suaviza la capa córnea, limpieza profunda y revitalizante. El efecto del extracto de limón limpia perfectamente, ilumina la piel. Suaviza y tonifica, estimula el crecimiento de nuevas células, absorbe el exceso de sebo, tonifica.
Extrae suavemente las impurezas y las células de la piel muerta. Devuelve la luminosidad, ayuda a unifica el tono.
Extracto de limón: ayuda a limpiar la piel de impurezas y espinillas además cierra los poros evitando que se obstruyan. Mejora la apariencia de las manchas y ayuda a unificar el tono de la piel. Es un antioxidante natural ayudando, así, a combatir la acción de los radicales libres, que son los responsables del envejecimiento de las células. Es un exfoliante natural. Aporta brillo y luminosidad a la piel.
Alantoína: destruye la piel muerta permitiendo la limpieza y mejora de la piel dañada; de este modo se impide la acumulación de materia fácil de contaminar por bacterias. Estimula la epidermis, concretamente el epitelio granuloso, que es la zona en la que se generan las nuevas células que reemplazarán a aquellas que están dañadas o envejecidas.
Aplica el producto sobre tus manos y crea una espuma suave. Distribúyela en tu rostro realizando movimientos circulares.
Retira completamente con agua templada.
Espuma de limón y yogurt con ácido láctico suaviza la capa córnea, limpieza profunda y revitalizante. El efecto del extracto de limón limpia perfectamente, ilumina la piel. Suaviza y tonifica, estimula el crecimiento de nuevas células, absorbe el exceso de sebo, tonifica.
Extrae suavemente las impurezas y las células de la piel muerta. Devuelve la luminosidad, ayuda a unifica el tono.
Extracto de limón: ayuda a limpiar la piel de impurezas y espinillas además cierra los poros evitando que se obstruyan. Mejora la apariencia de las manchas y ayuda a unificar el tono de la piel. Es un antioxidante natural ayudando, así, a combatir la acción de los radicales libres, que son los responsables del envejecimiento de las células. Es un exfoliante natural. Aporta brillo y luminosidad a la piel.
Alantoína: destruye la piel muerta permitiendo la limpieza y mejora de la piel dañada; de este modo se impide la acumulación de materia fácil de contaminar por bacterias. Estimula la epidermis, concretamente el epitelio granuloso, que es la zona en la que se generan las nuevas células que reemplazarán a aquellas que están dañadas o envejecidas.
Aplica el producto sobre tus manos y crea una espuma suave. Distribúyela en tu rostro realizando movimientos circulares.
Retira completamente con agua templada.




